La mayor parte de las empresas deben enfrentar un universo competitivo cada vez más denso y complejo. Estas empresas deben librar la batalla pero no saben como ni contra quien. Así mismo el comercio minorista se enfrenta actualmente a grandes cambios como la entrada de grandes grupos empresariales, con una enorme capacidad de inversión, la implantación de nuevos esquemas comerciales, la incorporación de nuevas tecnologías y los cambios en los hábitos de consumo de los individuos.